Concejales quieren congelar precios de la construcción, aunque en el mercado siguen faltando materiales

“Necesitamos que sea el mercado el que imponga los precios y que nos dejen de mandar”, afirman empresarios vinculados al sector

Este martes, en la Comisión de Producción del Concejo Municipal de Rosario, quedó en estudio un proyecto del concejal kirchnerista Andrés Giménez que impulsa un congelamiento de precios en materiales de la construcción, mientras en el mercado aún siguen faltando materiales para absorber la demanda actual.

Concretamente, la iniciativa –que fue acompañada por Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular, y Ariel Cozzoni, de Unite-Un Gol para Rosario, propone la creación del Programa “Precios Justos para Bienes de la Construcción”. De acuerdo con el autor del proyecto, la intención es alcanzar entre el Ejecutivo, el Banco Municipal de Rosario y los empresarios privados “un congelamiento voluntario” de los precios.

Iniciativas de este tipo sobran en Argentina. Si bien se han implementado con distintos nombres (Precios Cuidados, Precios Máximos, Precios Justos), pero el resultado siempre es el mismo: escasez y desincentivo a producir o invertir.

En ese sentido, fuentes del sector de la construcción local aseguraron que estos proyectos “ni ayudan ni sirven”, sino que lo único que hacen es “complicarnos más las formas para trabajar”. “Necesitamos paz y que sea el mercado el que imponga los precios, que nos dejen de mandar y decir hasta dónde se puede ganar”, expresaron.

“Hoy, los empresarios no están en una posición de poder ceder determinado porcentaje, porque si bien venimos con un acelere en los últimos meses, la situación es compleja; nos va a llevar tiempo recuperarnos de lo que fue la cuarentena, además de que tenemos una presión fiscal infinita”, señalaron.

Además, recalcaron que hoy, al no poder conseguirse dólares, “hay escasez de todo tipo de materiales: no tenemos ladrillos, no tenemos piletas, hay faltante de hierro. Y si encima quieren impulsar esta medida, es como que quieren que cerremos o que nos volvamos locos”, manifestaron.

Con respecto a esta situación, las fuentes del sector explicaron que la demanda no se llega a cubrir porque “las fábricas no tienen infraestructura”, y agregaron: “Una de las cementeras más importantes de Argentina tiene sus hornos parados porque no puede invertir en infraestructura. Es la historia de siempre. Se retrasa rodo. También se necesita comprar camiones y no hay disponibilidad”.

REDACCIÓN ON24

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