El miércoles pasado quedó inaugurado el destacamento de Gendarmería en Funes. Un acto por cierto intrascendente si se tiene en cuenta que no hay certezas sobre la llegada de los efectivos que deberían ponerlo operativo como sede.
En septiembre del 2014, la Intendente de esa localidad, Mónica Tomei, convocó a los barrios privados a realizar un aporte voluntario para ayudar a levantar una sede de Gendarmería. En la ocasión, algunos se preguntaron el motivo de no haber hecho extensivo el pedido a todos los ciudadanos que desearan colaborar con una obra que le corresponde naturalmente al Estado.
Finalmente la sede de los Gendarmes quedó inaugurada: Se trata de una sencilla casa de una planta -cuatro oficinas, dos baños, dos dormitorios, cocina comedor y cocheras- cuya construcción demandó más de un año.
Ubicada en el ingreso de la ciudad, a metros de la Autopista Rosario Córdoba, la vivienda oficiaría de base de operaciones de 20 hombres, dos móviles y cuatro motos, al menos esa sería la promesa del actual gobierno nacional a muy pocos días de finalizar su gestión.
