De Vido señaló que ambas medidas representan la incorporación de 450.000 toneladas anuales de biodiesel al mercado local y recordó que Argentina posee una capacidad instalada de producción de 4 millones de toneladas de biodiesel, y hasta hoy casi 850.000 se volcaban al mercado local.
Pero con las nuevas medidas, se eleva del 21 al 33% la utilización de la capacidad instalada de la industria para abastecer el consumo del mercado local, “sin impacto en los costos actuales de los combustibles”.
Así, el pais se convierte en líder mundial en corte obligatorio de gasoil con biodiesel, ya que sólo en algunos estados de Colombia se corta al 10%, mientras en el caso de las usinas, la incorporación representa la demanda eléctrica anual de 400.000 hogares.
Para Pucciariello, solo faltaría la publicación de los precios. “Hace 3 meses que no tenemos publicación de precios”, apuntó. Y que sean acorde a los costos de las compañias.
Por otro lado, los empresarios destacaron las formas en que se realizaron los anuncios y sus interlocutores. “Fue realmente un cambio de 180 grados; antes ni nos atendian los teléfonos”, indicaron los consultados. La reunión fue “cordial”, y fue Julio De Vido quién tomó la posta. Quienes participaron del cónclave, coincidieron en señalar que el funcionario conoce la problemática energética del pais al detalle.
A partir de esto, Julio De Vido recalcó la necesidad de que la industria aceitera y la de biodiesel, al tener más escala “tienen el deber y la meta de generar nuevos mercados para el resto de la soja que se exporta sin procesar”
