¿Qué esperan las empresas del próximo gobierno?

La próxima nota central de la Revista ON24 tratará sobre la “opresión fiscal” que sufre actualmente el sector empresario/inversor en la provincia de Santa Fe. Tres expertos en tributación explican, en el informe, cuáles son los desafíos que deberán enfrentar la próxima administración nacional y provincial para intentar aliviar la presión impositiva.

Pero para saber qué esperan los distintos sectores empresarios de los futuros presidentes y gobernadores en lo que a presión fiscal refiere, ON24 consultó a cuatro cámaras de la actividad comercial e industrial: la Federación Gremial de Comercio e Industria (Fecoi); la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica (Aehgar); la Corporación de Empresas Inmobiliarias de Rosario (CEIR) y la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA).

Desde la Fecoi, por ejemplo, proponen una “revisión de la red de impuestos cruzados a nivel nacional”, porque, asegura, “los impuestos nacionales y provinciales cuentan hoy con mecanismos de retención, percepción y anticipos con efectos muchísimos más lesivos que el mismo impuesto”. Y añade: “La sobre retención y la consecuente falta de reintegro de saldos a favor, provoca una tributación efectiva de una alícuota mayor que la del impuesto. Esto desfinancia a las empresas y les resta competitividad. Mucho dinero de la empresa se encuentra depositado en las arcas del Estado sin poderlo disponer”.

Además, en términos provinciales considera que es necesario “migrar el impuesto a los Ingresos Brutos a un impuesto al consumo en etapa final y discriminado en factura, evitando las distorsiones sobre los costos que implica su carga implícita en los precios”. “El Estado Provincial debe guardar responsabilidad al momento de determinar alícuotas de retención y estas no superar en ninguno de los casos el 30% de la alícuota del impuesto, ya que desnaturalizan su carácter de anticipo”.

Por otra parte, también sostiene que “son importantes las políticas de Promoción, ya que no hay mejor manera de recaudar impuestos que incrementando la actividad económica. Sus efectos sobre la recaudación son muchísimo mayores que el aumento de impuestos e infinitamente más positivos socialmente”.

En tanto, los hoteleros-gastronómicos de la ciudad señalaron que esperan “una matriz impositiva que contemple mayores facilidades de pago”, ya que de acuerdo al estudio realizado el Instituto de Análisis fiscal (IARAF) solicitado por FEHGRA en 2014, “el principal componente del costo impositivo (antes del IVA) lo constituyen los aportes y contribuciones al régimen de seguridad social con aproximadamente el 60% del total , seguido por el impuesto a los ingresos brutos, que registra una participación en torno al 20%”.

Además, a nivel provincial, la Aehgar tiene presentado un proyecto en Cámara de Diputados para declarar a la actividad como industria, lo cual reducirá la alícuota de ingresos brutos y permitirá al sector acceder a nuevas líneas de créditos promocionales.
Asimismo, desde el sector se solicita un mayor control municipal sobre la competencia desleal.

Por su parte, la CEIR indica que el sector inmobiliario y la cadena de valor de la construcción “se deben un análisis y estudio integral para lograr una matriz impositiva ordenada”. Alega que actualmente existen distorsiones que considera deben ser corregidas: como la renovación del monto-piso del IVA, fijado hace 15 años, que se aplica a las locaciones comerciales y castiga a pequeños emprendedores; la desgravación del Impuesto a los Débitos y Créditos para lograr mayores niveles de actividad económica y empleo, y ayudar a paliar el déficit habitacional descomprimiendo los precios de las locaciones de vivienda. A nivel provincial, afirman que desde enero se incrementaron un 20% las alícuotas de Sellos y también en Ingresos Brutos.

Por último, desde la CIARA manifiestan que es “imprescindible un esquema impositivo que incentive la generación de valor agregado estableciendo normas claras para la devolución del IVA, fije normas incontrovertibles para la validez de las compras a productores y/o acopiadores en el mercado doméstico y adecuar el Impuesto a las Ganancias a la realidad del comercio exterior del sector (precios de transferencia), así como revisar el nivel de los derechos de exportación, en primer lugar de trigo, maíz y girasol, como incentivo a la producción”.

Además, las cámaras indicaron cómo es específicamente la presión fiscal que sufre actualmente, lo que estará detallado en el informe de la revista, disponible a partir de la semana próxima.

REDACCIÓN ON24

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