¡Quiero bajar de peso, ya!

La ansiedad es un componente que puede colocarse en contra a la hora de controlar el peso. La Dra. Tamara Cudi, Jefa del Servicio de Nutrición de Grupo Gamma, nos explica por qué es importante tomarse el objetivo de adelgazar pacientemente, como un proceso que implica un cambio en la forma de vida.

¿A quién no le pasó? Cuando estamos tratando de bajar de peso y, después de unas semanas, perder la motivación y tirar todo por la borda. No tenemos más ganas de hacer el esfuerzo de restringirnos y no sostenemos el hábito de hacer actividad física. Hasta que aparece en la televisión alguna pastilla milagrosa que muestra el antes y después, las plantillas que queman calorías, aritos mágicos, acupuntura, etc. Ahí es cuando decimos ¿por qué no intentar otra vez?

Al otro día, previa cena de despedida, nos levantamos y comenzamos a implementar la dieta milagrosa, a veces acompañada de algún maravilloso producto. Pasan los días y los resultados se hacen desear y allí estamos de nuevo: decepcionados y llenos de frustraciones.

Por lo general, cuando se trata de de adelgazar, todos queremos obtener resultados inmediatos. Pero no nos damos cuenta de que para lograr el peso adecuado no hay recetas mágicas. Para vernos bien, como queremos, debemos transitar un camino de aprendizaje, de pequeños cambios sostenibles y de reeducación alimenticia. Adquirir hábitos nutricionales saludables y una vida activa es la única manera de lograrlo.

No es posible bajar de peso de un día para el otro, pero si nos comprometemos podemos alcanzar resultados tan mágicos como reales.

Te acercamos 10 tips que te ayudarán a conseguir ese objetivo sin poner en riesgo tu salud:

  • Disminuir la porción usando platos más pequeños.
  • Tomar agua ayuda a mantenerse hidratado, a tener una mejor digestión y sentir satisfacción por más tiempo, además de eliminar las toxinas del cuerpo.
  • Moverse todos los días un poco.
  • Subir escaleras siempre que sea posible.
  • Desayunar máximo una hora y media después de levantarte.
  • Dejar gaseosas y jugos artificiales, llenos de azucares y calorías.
  • Consumir una porción de vegetales, preferiblemente frescos, en cada comida principal.
  • Incorporar frutas como colación o postres.
  • Dejar de hacer dietas raras. Comprométete a aprender a comer saludablemente y convierte esto en una forma de vida.
  • No permitas que tu peso sea el centro de tu vida.

Para armar un Plan Alimentario a tu medida, recomendamos realizar una consulta con alguno de nuestros profesionales.

Fuente: Dra. Tamara Cudi, Jefa del Servicio de Nutrición de Grupo Gamma

 

Comentarios