“La libertad debe avanzar también en materia monetaria, cambiaria y financiera”

El exministro de Economía destacó que las señales de apoyo internacional y la búsqueda de consensos configurarían un marco favorable para el próximo bienio.

El exministro de Economía Domingo Cavallo publicó una nueva columna en la que analizó el escenario económico tras las elecciones legislativas de medio término, en las que el presidente Javier Milei obtuvo un triunfo que —a su juicio— abre la posibilidad de un período de “estabilidad, reactivación y crecimiento sostenido” para la Argentina.

En su texto, Cavallo destacó que las señales de apoyo internacional y la búsqueda de consensos internos podrían configurar un marco favorable para el próximo bienio. Sin embargo, advirtió que el país necesita avanzar también “en materia monetaria, cambiaria y financiera” para consolidar una verdadera libertad económica.

Apoyos internacionales y señales al mercado

Según el exministro, el respaldo del expresidente estadounidense Donald Trump y del financista Scott Bessent —referente cercano al entorno de Milei— constituye un factor clave para reabrir el acceso de la Argentina al mercado internacional de capitales. A su entender, este acompañamiento busca reducir el riesgo país y atraer inversiones directas hacia sectores estratégicos.

Cavallo observó, sin embargo, que algunas señales recientes podrían generar confusión entre los analistas. Si bien reconoció la intención del gobierno norteamericano de colaborar con la estabilización argentina, señaló que la utilización de recursos del Fondo de Estabilización Cambiaria para sostener el valor del peso “resulta contradictoria con el objetivo de consolidar la baja del riesgo país”.

El economista consideró que esas intervenciones, posiblemente destinadas a evitar una devaluación antes de las elecciones, tenderán a desaparecer con el correr de los meses.

Cavallo se refirió también a la presentación que el vicepresidente del Banco Central, Vladimir Werning, realizó en Washington ante inversores internacionales. Según el exfuncionario, el documento —publicado después de los comicios— anticipa una política de compra de reservas mediante emisión monetaria sin esterilización, un giro que “el FMI y la mayoría de los economistas profesionales” venían recomendando desde comienzos de año.

En su análisis, Cavallo celebró ese posible cambio de enfoque y remarcó que “la libertad debe avanzar también en materia monetaria, cambiaria y financiera”, al considerar que la actual estructura regulatoria continúa limitando el desarrollo económico.

Liberalización del sistema monetario y financiero

El exministro planteó que la confianza de los inversores solo podrá restablecerse si el Gobierno elimina las restricciones cambiarias y restituye la convertibilidad plena del peso, otorgando además curso legal al dólar.

Recordó que durante la década de 1990, bajo su gestión, la convertibilidad permitió estabilizar los precios y consolidar la confianza de los agentes económicos. Explicó que, aunque la ley sancionada en 1991 establecía un tipo de cambio fijo, “ese no es un elemento indispensable” para un sistema bimonetario moderno, donde puedan coexistir pesos convertibles y dólares en igualdad de condiciones.

“La convertibilidad del peso y el reconocimiento del dólar como moneda de curso legal permitirían re-monetizar la economía, expandir el crédito al sector privado y reducir drásticamente las tasas de interés”, escribió Cavallo.

Además, sostuvo que estas reformas deberían implementarse mediante una ley del Congreso, para dotarlas de estabilidad jurídica y evitar retrocesos. En ese sentido, sugirió que el debate se lleve a cabo en paralelo con la discusión del presupuesto 2026.

Referencias históricas y mirada hacia el futuro

Cavallo sostuvo que el Gobierno se encuentra ante una “nueva oportunidad” de consolidar la estabilidad y retomar un camino de crecimiento, apoyado en el diálogo político y en la coherencia de sus reformas.

En su opinión, el presidente Milei podría retomar las ideas que impulsó durante la campaña electoral de 2023, centradas en la dolarización o la competencia de monedas, como garantía de los derechos de propiedad de los ahorristas y productores.

El exministro recordó que, tras la crisis de 2002, el país nunca logró reconstruir un sistema monetario y financiero “liberal y estable”, y que las intervenciones estatales continuas limitaron el desarrollo del crédito y la inversión.

Optimismo con cautela

Pese a sus advertencias, Cavallo se mostró optimista respecto de los próximos dos años. Consideró que las negociaciones con el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos y con el Fondo Monetario Internacional, junto con la experiencia teórica de Milei en materia monetaria, podrían conducir al Gobierno a instaurar un régimen de convertibilidad del peso acompañado del curso legal del dólar.

“De hacerse pronto por ley, es posible que en 2026 se logren los mismos resultados que el gobierno de Menem alcanzó desde abril de 1991: una caída sostenida de la inflación y una reactivación vigorosa de la economía”, señaló.

Cavallo recordó que aquel año la economía creció 10%, y que durante los siguientes cuatro años el crecimiento promedio fue del 7% anual.

Finalmente, mencionó que la dolarización completa, impulsada originalmente por Emilio Ocampo y respaldada en su momento por el propio Milei, representaba una alternativa más sencilla de comunicar, pero con un objetivo similar al del sistema bimonetario que él propone: garantizar la estabilidad y la irreversibilidad de la reforma monetaria.

Con ese horizonte, el exministro concluyó que la administración Milei tiene ante sí la oportunidad de consolidar una transformación económica profunda, si logra extender el principio de libertad también al ámbito monetario y financiero.

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