Con la derogación de la Ley de Alquileres, los inquilinos deberán enfrentar fuertes aumentos a partir de abril de 2025. Los contratos firmados entre julio de 2020 y octubre de 2023, regidos por la ya derogada Ley 27.551, se ajustan una vez por año según el Índice para Contratos de Locación (ICL). Para quienes deban actualizar su contrato en abril, el incremento será del 116,85%.
Esto significa que un alquiler que hasta marzo era de $100.000, pasará a costar $216.850 por mes.
Desde diciembre de 2023, tras el DNU 70/2023, los nuevos contratos quedaron fuera del régimen anterior. Ahora se acuerdan libremente entre partes, y en general se actualizan de manera trimestral, utilizando el Índice de Precios al Consumidor (IPC). En esos casos, el aumento estimado para abril será de alrededor del 7,5%.
Por ejemplo, si un inquilino firmó en enero de 2024 por $100.000, en abril pagará $107.500.
También existen contratos con ajustes cuatrimestrales o semestrales, con subas del 9,70% y el 15,90% respectivamente, dependiendo del acuerdo y de la inflación acumulada.
Los especialistas recomiendan a propietarios e inquilinos revisar las cláusulas contractuales, ya que los aumentos varían según el tipo de acuerdo y el índice utilizado. Además, se aconseja usar calculadoras de alquileres para estimar los nuevos valores con anticipación.
Con reglas más claras y flexibilidad en los contratos, el mercado de alquileres comienza a mostrar señales de mayor dinamismo y previsibilidad, beneficiando tanto a propietarios como a inquilinos.