Bodegas Bianchi, con más de 90 años de trayectoria en la elaboración de vinos y espumantes, da un paso audaz en su estrategia de diversificación con el lanzamiento de The Temple Bar, su primer whiskey de alta gama. Se trata de una edición limitada desarrollada en colaboración con The Temple Bar Whiskey Company, directamente desde Dublín, Irlanda.
El nuevo destilado es un Single Malt de 18 años, de los cuales 15 maduró en barricas de bourbon y completó su afinamiento durante 3 años en barricas de Malbec Enzo Bianchi, el emblemático vino de la bodega. Este paso final le otorga una complejidad y carácter únicos, resultado de la fusión entre dos mundos: la tradición irlandesa del whiskey y la esencia vitivinícola del terroir mendocino.
Solo se produjeron 900 botellas de 700 ml, que estarán disponibles a un precio sugerido de $300.000 exclusivamente en la tienda online de la bodega y próximamente en vinotecas seleccionadas.
“El paso por barricas de Malbec aporta estructura, profundidad y una impronta distintiva que enriquece la suavidad del whiskey irlandés”, explicó Silvio Alberto, Chief Winemaker de Bodegas Bianchi. El resultado es un destilado de color ámbar intenso, con aromas a frutas maduras, roble y especias, y un paladar equilibrado que refleja el carácter de ambos mundos.
Pablo Glöggler, CEO de la bodega, destacó que esta apuesta refleja “una visión de marca global que busca trascender fronteras, innovar y conquistar nuevos públicos con propuestas premium que mantengan el sello de calidad Bianchi”.
Por su parte, Tom Cleary, actual propietario del icónico pub The Temple Bar en Dublín, retoma con este proyecto una histórica tradición familiar: mezclar y embotellar whiskey artesanalmente en el propio bar.
Este lanzamiento llega en un contexto de creciente interés por los destilados de alta gama. Según datos del Museo del Whisky, el consumo de esta bebida creció cerca de 6.000 % desde el año 2000, y actualmente los segmentos premium y super-premium representan el mayor valor del mercado, con proyecciones de crecimiento del 52 % en los próximos tres años.
La inversión detrás de The Temple Bar rondó el millón de dólares, y forma parte de una estrategia más amplia de la bodega, que en los últimos años incorporó nuevos productos como gin, vermut, aceite de oliva y aceto balsámico.
Con esta iniciativa, Bodegas Bianchi reafirma su condición de marca global presente en más de 40 países, y marca un nuevo hito desde sus fincas en San Rafael y en el Valle de Uco, continuando una tradición familiar que mira al futuro con innovación y excelencia.