Una convocatoria que los puede perjudicar

La estrella del pop ha publicado una provocativa imagen en su cuenta oficial de Twitter en la que anima a las mujeres a acudir a la marcha convocada contra el próximo presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, mostrando un logo de Nike rapado en su pubis.

Polémica como pocas, la estrella norteamericana del pop, Madonna, ha vuelto a convulsionar las redes sociales con su particular convocatoria realizada hace tan sólo unos días a través de su cuenta oficial en una de las plataformas más populares del mundo, Twitter, donde la estadounidense cuenta con casi un millón y medio de seguidores.

La cantante publicó una imagen muy sugerente en la que animaba a las mujeres a participar en la Marcha de Mujeres sobre Washington que se celebrará el próximo sábado, tan sólo un día después de la toma de posesión de Donald Trump como nuevo presidente de los Estados Unidos con el lema “¡Sí! Simplemente, hazlo. ¡La marcha del millón de mujeres! ¡Acude!”, y a la que ya han confirmado su asistencia estrellas del espectáculo como Scarlett JohanssonFrances McDormandJulianne MooreCher o Katy Perry.

A Nike no le gusta la convocatoria de Madonna

Lo polémico de la convocatoria, ya de por sí  algo provocadora, no es tanto la cita sino la imagen que acompaña a la misma, una imagen del pubis de la cantante con el logotipo de la multinacional estadounidense Nike rapado sobre su bello púbico, algo que no ha sentado nada bien a la compañía norteamericana, que no quiere verse envuelta en más problemas y polémicas con el nuevo presidente electo de los Estados Unidos.

Recordemos que hace casi un año, en Abril del año pasado, una organización norteamericana inició una campaña para exigir a Nike que rompiera los vínculos y relaciones comerciales que mantiene con el multimillonario norteamericano algo que en la compañía han comenzado a valorar muy minuciosamente la conveniencia o no de hacerlo, entre ellos, el acuerdo de alquiler del edificio donde se encuentra ubicada la NikeTown de la compañía en pleno centro de Nueva York, la flagship store, la tienda insignia de la compañía en la ciudad neoyorquina, un acuerdo que acaba precisamente en 2017.

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