Sarjanovic y la “Doble Nelson” que sufren los productores. ¿Qué ve el ex Cargill en el mercado?

Según el economista rosarino, la baja en el precio de los commodities y la suba de retenciones forman un cóctel ruinoso.

De visita en la ciudad para presentar su último libro “En desequilibrio”, Ivo Sarjanovic*, el economista rosarino que supo desempeñarse -entre varias otras actividades- como  vicepresidente de Cargill Ginebra y Gerente Mundial de Oleaginosas de Global Sugar, dialogó con ON24 no solo de la realidad del campo argentino, sino también del contexto mundial atravesado por la crisis desatada por el Coronavirus, su impacto en el precio de los commodities y la principales tendencias que marcan el pulso en las empresas del agro. 

Tu libro – en parte-  habla del rol de los empresarios en el surgimiento de los precios. Un tema que en Argentina tiene plena vigencia dado que el gobierno los señala como culpables de la inflación. ¿Hay algún paralelo entre lo que plantea tu libro y la coyuntura local?

El libro (En desequilibrio) es una análisis sobre los procesos de mercado, en los cuales, los empresarios forman precios. Este hecho no tiene nada de malo porque los precios vienen de algún lado, no son como las mareas que suben y bajan. Es un proceso que quizás está despersonalizado a nivel agregado pero no es malo si es competitivo. Lo que sí es malo es hacerlo de forma monopólica o con privilegios del gobierno. 

El tema de a inflación -desde el punto de vista teórico- está cerrado, cuando hay un exceso de oferta monetaria suben los precios. No hay relación entre el rol de los empresarios y la inflación, dado que el problema surge de un desequilibrio monetario que se origina en déficits fiscales que no pueden financiarse de forma legítima, sea a través de impuestos, endeudamiento interno o externo. La no existencia de inflación en el mundo no se da porque los empresarios son más buenos, sino porque las políticas monetarias son prudentes. 

¿Cómo caracterizarías los primeros meses del gobierno de Alberto Fernández? 

Hay dos características claves. Una es el foco en la renegociación de la deuda  cuyo desenlace puede generar escenarios macroeconómicos muy diferentes. Hay que ver cuánta receptividad tiene la propuesta, pero eso depende del plan que presente el gobierno, del cual no se sabe nada. La segunda característica es que no hizo nada original. Subió impuestos y el resto pasa por un simple congelamiento de precios y acuerdos que se sostienen- supongo- hasta que el gobierno renegocie la deuda y anuncie algún plan. 

La discusión a dar es cómo bajar el gasto público, de ahí bajar los impuestos y ver cómo se puede crecer de nuevo. 

Yendo a un tema más general, ¿hacia dónde crees que van la empresas del sector agrícola en la actualidad?

Una de las grandes tendencias es que se ha democratizado el acceso a la información  y eso hace que haya menos volatilidad de precios, con la consecuencia de menores oportunidades de ganancia. Entonces, las empresas que se conocen como ABCD (Archer Daniels Midland (ADM), Bunge, Cargill y Louis Dreyfus) tienen menos posibilidad de generar beneficios haciendo trading y eso deprime la rentabilidad, las lleva hacer ajustes de costos importantes y se tienen que reinventar. 

Hay que tener en cuenta el cambio de las preferencias de los consumidores, que apuntan a más trazabilidad, quieren saber de dónde viene lo que están comiendo, tienen gustos diferentes (por ejemplo, se ponen de moda la carne de proteína vegetal, que viene a disputar una porción del mercado). La gente tiene valores más verdes. Probablemente veremos bancos reticentes a financiar compañías con impacto ambiental, otras empresas se dedicarán a juntar crédito de carbono para poder venderlo en el mercado secundario (…) Esto va a provocar que la cadena de valor en el futuro sea muy diferente. 

¿Hay alguna posibilidad -aunque sea mínima- de mensurar el impacto de la crisis del Coronavirus en el mercado de commodities?

No hay evidencia empírica anterior que ayude a mensurar un impacto de semejante magnitud. Esto es un cisne negro que hace que el factor trabajo haya perdido movilidad en pos de que la gente no se contagie, esa retracción de oferta hace que se caiga la demanda. 

Por otra parte, el derrumbe de los precios del petróleo le pega a los commodities agrícolas porque hay varios, como el maíz o  el aceite de soja, que se destinan a biocombustibles que compiten con el petróleo, y al abaratarse el petróleo precisan mayores subsidios o menores precios para entrar en las fórmulas. Esto es una noticia nefasta para la Argentina y mucho más para el productor que tiene retenciones más altas y precios más bajos. 

Pasado el Coronavirus las cosas se irán recuperando gradualmente, el tema es saber desde qué nivel partimos y cuán rápida será la recuperación, y eso es difícil saberlo hoy. 

¿Cómo crees que va a afectar  la Argentina esta situación, que se suma problemas de arrastre como la fiebre porcina africana, entre otros?

Argentina es un exportador de commodities y va a sufrir las consecuencias del contexto. Hay que tener en cuenta que el mercado agrícola fue afectado en los últimos 18 meses por tres eventos serios. El primero es la crisis entre EE.UU y China. El segundo es la Gripe Porcina Africana, que redujo el  stock chino de cerdos, los cuales, consumen maíz y harina de soja, provocando una baja en la demanda. Eso estaba en tren de recuperarse pero está condicionado por el Coronavirus, que es el tercero de los ingredientes de un cóctel que combina factores y externos nada buenos para el país.

*Sobre Ivo Sarjanovic

Master en Economía, Universidad Francisco Marroquín. Contador Público Nacional por la Universidad Nacional de Rosario. Executive studies en IMD-Lausanne, Oxford University- Said Business School y Harvard Business School.

Trabajó en Cargill durante 25 años como trader del mercado de granos y oleaginosos en Rosario, Buenos Aires, San Pablo y Ginebra. Fue vicepresidente de Cargill Ginebra desde el 2000 hasta el 2014 donde se desempeñó en distintas etapas de su carrera como Gerente Mundial de Oleaginosas, Business Unit Leader para África y Middle East y Business Unit Leader de Global Sugar. Entre 2014 y 2017 fue el CEO de Alvean (un joint venture entre Cargill y Copersucar), la mayor empresa de trading de azúcar del mundo. Actualmente ocupa roles de director no ejecutivo en diferentes empresas de la industria agrícola y es profesor part-time de “Commodities Agrícolas” en el Master de Trading de la Universidad de Ginebra, Suiza.

REDACCIÓN ON24

Por Mariano Fortuna / m.fortuna@on24.com.ar

 

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