Celulosa Argentina recibe salvataje de US$18 millones para reactivar sus plantas de Capitán Bermúdez y Zárate

El nuevo propietario, Esteban Nofal, otorgó un crédito millonario a la histórica papelera para recuperar la producción y reabrir las instalaciones paralizadas

Después de meses de inactividad y de un proceso concursal que la dejó al borde del colapso, Celulosa Argentina S.A. comienza a escribir una nueva etapa. La histórica papelera, símbolo del cordón industrial santafesino, recibió una inyección de capital de 18 millones de dólares proveniente de su principal accionista, Esteban Antonio Nofal, quien decidió financiar directamente la reactivación de las plantas de Capitán Bermúdez y Zárate.

El crédito fue autorizado judicialmente por el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial de San Lorenzo, donde tramita el concurso preventivo. Se trata de un préstamo a dos años de plazo, con una tasa anual del 10% y garantizado mediante un fideicomiso de cuentas por cobrar, una herramienta que busca asegurar el destino productivo de los fondos.

La operación representa el primer movimiento concreto del plan de saneamiento que Nofal puso en marcha tras asumir el control de la compañía a fines de 2024. En ese momento, adquirió la firma por la simbólica suma de un dólar, asumiendo un pasivo cercano a los 150 millones y comprometiéndose a sostener su reestructuración financiera y operativa.

Con esta nueva inyección de capital, la prioridad es garantizar el pago de salarios, cubrir costos energéticos y asegurar el arranque progresivo de la producción, especialmente en la planta de Capitán Bermúdez, donde se elaboran papeles para impresión, escritura y packaging.

Bermúdez, el corazón que busca volver a latir

Ubicada a orillas del río Paraná, la fábrica santafesina fue durante décadas un emblema industrial del país. Sin embargo, la crisis económica, el aumento de los costos energéticos y la caída del consumo la dejaron completamente paralizada, afectando a cientos de familias y proveedores.

Ahora, el crédito de Nofal podría devolver actividad y empleo a la zona. Se estima que más de 400 trabajadores podrían reincorporarse gradualmente, además del impacto indirecto en talleres, transportistas y empresas de servicios del área.

De crisis a oportunidad

El aporte no proviene de bancos ni de inversores externos: es capital del propio dueño, un gesto poco habitual en compañías en concurso. Con esta decisión, Nofal —hijo del recordado empresario Luis Benjamín Nofal, cofundador de Torneos y Competencias— busca devolverle sustentabilidad a la mayor productora de papel del país, que hoy intenta recuperarse de una caída del 44% en sus ingresos y de pérdidas millonarias registradas durante el último ejercicio.

El empresario, que además controla CIMA Investments S.A., diseñó una estrategia que combina recapitalización, renegociación de deuda y modernización productiva, con el objetivo de reposicionar a Celulosa en el mercado local y recuperar su perfil exportador.

El anuncio fue recibido con expectativa en el Gran Rosario, donde la reapertura de la planta de Bermúdez se interpreta como una señal alentadora. La recuperación de Celulosa no sólo implica volver a producir papel, sino también reconectar a una comunidad con su identidad industrial.

Comentarios