La aprobación en el Concejo Municipal de Rosario de la ordenanza que declara la autonomía local fue definida por el intendente Pablo Javkin como un hecho “histórico” que cierra una espera de más de un siglo. En una entrevista radial, el mandatario remarcó que la ciudad “recupera la libertad institucional que reclamó desde 1880” y que la decisión marcará un cambio inmediato en la gestión diaria.
“Rosario va a sacar de su cabeza el pie que tenía en términos legales e institucionales”, enfatizó Javkin. Según explicó, la autonomía permitirá acelerar trámites, digitalizar procesos, mejorar servicios y sostener un modelo de obras públicas con equilibrio fiscal. “El vecino lo va a notar en lo inmediato; es un cambio administrativo y burocrático que se traslada a la vida cotidiana”, aseguró.
El intendente precisó que algunas de las nuevas facultades empezarán a regir desde la próxima semana, cuando se promulgue la ordenanza. Entre los cambios operativos mencionó la obra pública con pavimento definitivo, la habilitación industrial para impulsar empleo, y mejoras en la movilidad y el transporte, especialmente en la vinculación con otras ciudades.
Estabilidad fiscal y rechazo a nuevos tributos
Frente a la inquietud planteada por sectores empresarios y parte de la oposición respecto a la posibilidad de que la autonomía derive en nuevos impuestos, Javkin fue categórico: “Por el contrario”. Recordó que la ordenanza establece reglas explícitas de estabilidad fiscal que impiden crear tributos adicionales o asumir gastos que comprometan al municipio.
“Fue aprobado por amplia mayoría. Queremos preservar la historia de Rosario como ciudad austera, que cuida sus recursos”, señaló en diálogo con LT8. La medida incluye también la convocatoria a una Estatuyente en 2027 para definir la organización del poder local de cara al futuro.
“No soy partidario de una policía municipal”
Otro punto de debate fue la eventual creación de una fuerza municipal. Aunque la Constitución provincial deja abierta la posibilidad, Javkin ratificó su postura: “Nunca fui partidario de las policías municipales”. Sostuvo que la experiencia reciente demuestra que los resultados aparecen cuando se coordinan las competencias entre municipio, provincia y Nación, sin multiplicar estructuras.
El intendente remarcó que las mejoras en seguridad logradas en barrios como Estela Maris y Amuncurá se consiguieron con trabajo conjunto y sin crear nuevos cuerpos. “Lo que había que hacer era controlar las cárceles, poner patrulleros, reforzar la estructura social y limpiar la corrupción. Eso está dando resultados”, afirmó.
Un nuevo escenario para el desarrollo metropolitano
Javkin también destacó que la autonomía permitirá terminar con trabas que frenaban proyectos con ciudades vecinas. “Hasta ahora, para extender una línea de transporte a Soldini o Pérez había que pedir autorización provincial. Eso se termina”, explicó.
Lo mismo aplicará para obras de conectividad urbana con Funes, Villa Gobernador Gálvez u otras localidades del Gran Rosario. Si bien aclaró que la ejecución dependerá de la disponibilidad de recursos, consideró que “se destrabaron mecanismos que demoraban todo durante años”.
El intendente citó incluso a Lisandro de la Torre para remarcar que Rosario no debe ser tratada como una “delegación administrativa” de otro nivel del Estado. “La ciudad tiene una fortaleza que supera esos marcos y desde ahora puede ejercerla de pleno derecho”, concluyó.






























