Con el espíritu festivo ya instalado —entre pan dulces, espumantes y luces navideñas— la marca italiana refuerza su presencia en el segmento premium con una caja de 7 unidades que combina variedad, estética cuidada y una experiencia de degustación completa.
Un trío icónico en un solo estuche
Ferrero Collection reúne, por primera vez en esta presentación, Ferrero Rocher, Raffaello y Ferrero Rondnoir, tres bombones que representan distintos perfiles de sabor y texturas:
- Ferrero Rocher: el clásico dorado, con avellana entera, relleno suave y cubierta crocante.
- Raffaello: la alternativa sin chocolate, con almendra blanca y coco, ideal para quienes prefieren notas más frescas.
- Ferrero Rondnoir: la versión intensa, con chocolate amargo y centro de perla crujiente.
Este surtido funciona como una degustación en miniatura: cada variedad ofrece una experiencia distinta, pero todas mantienen el sello de calidad que distingue a la compañía.
Ferrero trabajó un packaging especial, más sobrio y elegante, diseñado para integrarse a las tendencias de obsequios gastronómicos de pequeño formato que crecen en estas fechas. Su formato compacto permite sumar un detalle cuidado sin perder sofisticación.
Con presencia en el país desde 1993, la llegada de esta colección responde al movimiento global de Ferrero por consolidar su línea premium. Quienes siguen de cerca a la marca encuentran en este lanzamiento una opción accesible en tamaño pero distintiva en su propuesta gourmet.
Ya sea para acompañar la mesa dulce, para complementar un brindis o para resolver un regalo de último momento con elegancia, Ferrero Collection se convierte en una opción práctica, rica y visualmente impecable.
Porque en fiestas, tres sabores en una sola caja siempre son una buena noticia.
