La Pasionaria, la jabonería gourmet de Carina Cavazza y Mario Gerosa, ya cuenta una historia de 19 años que la llevó a consolidar su presencia nacional, pisando incluso el Teatro Colón con un estuche de exóticos jabones, jugando además en los mercados más exigentes del mundo.
La pandemia, puso un freno de mano temporal a los planes internacionales de la pareja, reorientando los cañones a la empresa misma. “Antes de la pandemia estuvimos muy abocados a posicionar nuestros productos en el mundo a través de ferias internacionales. Cuando nos sorprendió la cuarentena, nos detuvimos a mirar hacia dentro de la empresa y decidimos reacomodar, reordenar muchas cuestiones que habían quedado relegadas por nuestros viajes”.
Muy pronto ese esfuerzo redireccionado los llevó a consolidar su presencia en el centro de la ciudad: “En el Shopping del Siglo, de una góndola nos trasladamos a un local diseñado por la Arq. Cecilia Troilo”
“En octubre pasado abrimos en la Galería Paseo Peatonal de Mitre y Córdoba, para no perder los clientes que durante tantos años nos visitaron en el córner de Falabella”.
El mismo mes de octubre fue también plataforma de lanzamiento de una línea de cremas para rostro en alianza estratégica con un reconocido laboratorio local, Biocosmética Exel. Pero el mayor movimiento de la empresa tuvo que ver con la decisión de mudar su planta a un inmueble de mayores dimensiones en Fisherton, sobre Ruta 9, lindero a los condominios en construcción Único Golf.
“El edificio tiene una superficie de 650 metros cuadrados. Estará organizado en dos plantas, las oficinas en la parte superior y el depósito, un espacio para producción y el local comercial en la planta baja”, describe Gerosa la obra, cuyo proyecto y dirección están a cargo de la Arq. Mariel Suárez – Red Arquitectura-.
“Estamos en contacto con los desarrolladores de Único Golf, proyecto que contempla una suerte de galería con locales comerciales en su frente, con amplias veredas. Nuestro local acompañará la misma estética dando una continuidad a ese espacio”, detalló Cavazza.
Si bien la pandemia los enfocó en un reacomodamiento interno, el mercado internacional continúa seduciendo a una pareja elogiada en el exterior por sus productos: “Los llaman los productos de la nostalgia, porque conectan con lo más nuestro: el tango, el dulce de leche y las fragancias patagónicas”, describe Cavazza acerca de su variada paleta de aromas argentinos que llegaron hasta Japón. Mientras su esposo adelantó: “Estamos muy próximos a iniciar ventas a los Estados Unidos a través de una plataforma online. Calculamos que dentro de un mes a 45 días podremos exportar”, finalizó, recordando que los productos están presentes en todas las ciudades de la Argentina y el 80% de los aeropuertos nacionales.
